Gracia Plena

Llevémoslo a la práctica:

Con quién trabajas que te “cae mal”? Tal vez sean mandones, ruidosos o perezosos. Tal vez sean arrogantes, groseros o vulgares. Cualquiera que sea el caso, también pueden ser futuros hermanos o hermanas en Cristo a quienes Dios quiere extender gracia, ¡a través de ti!

Debemos recordar que todos en algún momento le hemos hecho enfadar a Dios, y probablemente todavía lo hagamos. ¿Cuál fue su respuesta? ¡Gracia, sublimidad de gracia!

Lo que es más asombroso es saber lo malos que aún podemos ser, incluso después de que la gracia de Dios haya caído sobre nosotros, y al mismo tiempo, podemos juzgar a otros que ni siquiera han conocido verdaderamente a nuestro Dios. Parece que, de alguna manera, esperamos que los no cristianos actúen como cristianos.

Jesús fue humilde y amable con los perdidos. Lloró por ellos, comió con ellos y les enseñó con mucha paciencia. Los amó antes de que lo conocieran. Incluso con Judas en la mesa, con Pedro después de su negación y con los recaudadores de impuestos corruptos de toda la vida, estamos asombrados por la gracia de nuestro Maestro.

Se nos recuerda nuevamente que hemos recibido una cantidad increíble de gracia y que todavía la necesitamos. En realidad, no estamos en condiciones de carecer de gracia para con los demás. Entonces, ¿quién es la persona que te molesta? Al igual que nuestro Señor, sé lleno de gracia, mientras Su Palabra obra en ti, hoy.


Efesios 2:4-5 (RVR1960) – Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo. ¡Por gracia sois salvos!

Efesios 2:8-9 (RVR1960) – Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.

Romanos 3:23-24 (RVR1960) – por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús.


Escuchando al Espíritu Santo (Rhema):

Buscad la paz con los que os desdeñan. Dad gracia a los que no entendéis. Lentamente os acercasteis, incluso ahora con dificultad para abandonaros a Mis caminos. Así como Yo os doy gracia, así también a Mis seguidores. Es la gracia, no el juicio, lo que atrae. Habrá un tiempo para el juicio. Toda la tierra conocerá ese tiempo, pero vosotros seréis sólo testigos, e incluso ahora es lo mismo. Vuestros ojos están bloqueados con una justicia que no es vuestra. Fuisteis llamados y purificados, no para que juzgaseis, sino para que otros supiesen de esa purificación. Ellos deben ser atraídos al Agua Viva. No seáis una barrera de justicia para los hambrientos. Ellos no saben lo que buscan. Si ven en vosotros desdén por los suyos, no probarán lo que vosotros habéis encontrado. He mostrado paciencia y bondad al mundo. Mis ojos ven el gran sufrimiento, pero esperad que vengan los atraídos. No sabéis a quién atrae el Padre; no juzguéis. Es un mal consejero el que no sabe a quién persigue. Se os ha dado gracia en abundancia; No te aferres a quien poco tiene.

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